La compañía Fagor Arrasate, englobada en Mondragón Corporación Cooperativa, ha dado un nuevo paso en la venta de su maquinaria en China. Su progresión en el gigante asiático ha añadido un nuevo capítulo con la confirmación de un pedido por parte de la firma Shangai Wanzhong Automotive Components. Se trata de un paquete formado una línea blanking de corte y una línea de prensa con troqueles progresivos.

La nueva línea blanking procesará bobinas de acero de alta resistencia de hasta 30 toneladas de peso, en anchos de 2.000 milímetros y espesores de hasta 4,5. La prensa de corte permitirá cortar cualquier geometría de acuerdo a los modelos de vehículo a fabricar y tendrá una capacidad de 1.000 toneladas métricas. Entre las máquinas que se incluyen en esta instalación están un almacén de bobinas, un carro de carga, un desenrollador electrónico, sistema de preparación de bobinas evacuación de recortes, aplanadora, alimentador cíclico, prensa mecánica automática y un apilador electromagnético. Las piezas más largas que pueden cortarse son de 4.000 milímetros.

Asimismo, Fagor Arrasate suministrará una segunda instalación consistente en una gran prensa de 10.000 KN con línea de alimentación de bobinas especializada en el trabajo con troqueles progresivos. El tamaño de esta máquina es de 4500 x 2.400 milímetros y la máxima velocidad es de 60 piezas por minuto. El material, también de alta resistencia, puede llegar a tener un espesor de cuatro milímetros y un ancho máximo de 1.150 mm.

Este pedido, de casi 10 millones de euros, corrobora la destacada trayectoria internacional de Fagor Arrasate, con un crecimiento constante en cada ejercicio, lo que coloca en una posición de relevancia en el contexto mundial en el campo de la máquina herramienta.

Concretamente en China, la compañía vasca ha encadenado una serie de proyectos que le han permitido encaramarse en los puestos de liderazgo en el sector de corte de piezas para automóvil. Antes de cerrar esta última operación, la firma guipuzcoana instaló una línea de blanking de grandes dimensiones en la siderúrgica local Baosteel y, actualmente, está poniendo en funcionamiento otra para la nueva planta de Thyssen en el norte del país.