Representantes del Consejo de Administración del Grupo Kamax, máximo órgano de representación del grupo alemán, se desplazaron el pasado viernes a Valencia para ratificar su apoyo al preacuerdo alcanzado entre la dirección y el comité de empresa de la factoría ubicada en Museros. La visita ha contado también con la presencia del alcalde de esta localidad, José Mª Aznar.

Los responsables de Finanzas y Operaciones de la central en Alemania, Silke Hartmann y Wolfgang Ruoff, han remarcado que se trata de una oportunidad histórica para consolidar el proyecto de Kamax en Museros. El acuerdo de flexibilidad permitirá aunar la capacitación técnica, formación y calidad del personal de esta fábrica con una proyección dentro del Grupo que asegure esta factoría y sus puestos de trabajo. Según han apuntado “no hay esperanza a medio plazo fuera de este camino, ya que es fundamental acomodarse a lo que el mercado y los clientes precisan y requieren”.

También han anunciado que su compromiso será firme siempre y cuando los trabajadores aprueben el acuerdo definitivo en el referendum que tendrá lugar el próximo miércoles 15 de septiembre. De ser así, el Grupo se compromete a integrar la factoría de Museros en sus planes de desarrollo. Para ello, tiene previsto realizar una inversión de 2 millones de euros para la mejora de la capacitación del personal y en maquinaria. Al respecto, el Grupo implantará el proyecto KPM que incide en la formación, entrenamiento, mantenimiento autónomo y mejora continua de todos los procesos y permitirá a la compañía ser más competitiva y asegurar su futuro. Asimismo, se invertirá en una nueva prensa para fabricar tornillos y dar cobertura al volumen adicional de 4 millones de euros de nuevos pedidos de piezas que el Grupo realizará en 2011.

El objetivo del Grupo también es que Kamax España obtenga el galardón TPM por excelencia operativa en 2013, y que se convierta en el Centro de Excelencia del Grupo en Europa en la fabricación de tornillos de rueda moleteados y espárragos.

Los representantes del Consejo han insistido en que todas las partes deben sumar esfuerzos para materializar un acuerdo que permitirá a los trabajadores de Museros acercarse a un esquema moderno de organización del trabajo, más acorde con lo que hoy en día impera en la industria de fabricación de componentes de automoción y, en particular, en el resto de factorías del Grupo Kamax.